Síndrome Down
Las personas con Síndrome de Down tienen una alteración genética (un cromosoma extra en el par 21), muestran unas características específicas.No es una enfermedad. Uno de cada 800 a 1.000 engendrados son niños con Síndrome de Down. El 80% de los niños con Síndrome de Down nacen de madres que han superado los 35 años de edad.
DESARROLLO PSICOMOTOR
“Los trabajos realizados sobre el desarrollo psicomotor de los niños y niñas con síndrome de Down, ha puesto de manifiesto una serie de peculiaridades asociadas que pueden explicar el retardo psicomotor que experimentan estos niños. Algunas de estas características son:
- Hipotonía: el tono se refiere a la tensión de un músculo cuando está en estado de reposo. La cantidad de tono está controlada por el cerebro. La hipotonía es una disminución de este tono muscular. La hipotonía hará más difícil aprender a mantener el equilibrio en determinadas actividades. Además, se ha visto relación entre ésta y los problemas para el reconocimiento táctil, cutáneo y kinestésico, afectando a la coordinación dinámica y óculo-manual, así como la percepción espacio temporal; con las consiguientes dificultades en la adquisición de la lectoescritura.
- Laxitud ligamentosa: esto implica un aumento de la flexibilidad de sus articulaciones, y eso nos lleva a que sus articulaciones sean menos estables y por ello les resulte más difícil mantener el equilibrio. Además, un aumento de flexibilidad de las articulaciones puede llevar a que éstas se deformen y conlleven complicaciones ortopédicas.
- Reducción de la fuerza: los niños con síndrome Down tienen menos fuerza muscular. La fuerza puede mejorar mucho mediante la repetición y la práctica. Es importante que aumente la fuerza muscular porque, de lo contrario, los niños tienden a compensar su debilidad haciendo movimientos que son más fáciles a corto plazo, pero resultan perjudiciales a la larga.
- Extremidades cortas: los brazos y piernas de los niños con síndrome Down son cortos en relación con la longitud de su tronco, esto repercute de forma que, actividades que normalmente podrían realizar, se vean limitadas.
- Alteraciones cardiorespiratorias: estas alteraciones no están directamente relacionadas con lo que es el aparato locomotor, pero sí es muy importante tenerlas en cuenta a la hora de realizar cualquier actividad física; así, sería bueno trabajar la resistencia.
Todos estos factores llevan a que el niño con síndrome de Down tenga barreras no sólo a la hora de practicar actividades físicas sino en su conducta motora diaria. Si no se trabaja bien desde pequeño, el niño puede presentar problemas de aceptación social debido a sus problemas motrices.”
DESARROLLO COGNITIVO
El retraso mental asociado al Sindrome de Down, alteraciones de la memoria y el lenguaje y defectos cognitivos en procesamiento auditivo-verbal, que con toda probabilidad dependen de las anomalías estructurales y funcionales presentes en el sistema nerviosos central, pudiendo dar como resultado diversos tipos y grados de disfunción cognitiva y neurológica. El retraso mental en el SD se caracteriza por la dificultad de adquirir y estabilizar la información como resultado de anormalidades neuronales concretas
La infancia se caracteriza por un retraso en el desarrollo cognitivo que conduce a un RM moderado y a un descenso del CI desde el primer año de vida hasta la infancia tardía (Brown, 1990; Hodapp et al.). En los individuos adultos se produce un deterioro cognitivo debido presumiblemente a un envejecimiento acelerado (Devenny et al., 1996; Lott et al., 2005).
En las personas con Sindrome de Down el coeficiente intelectual puede variar entre 40 y 80, pero lo más frecuente es que oscile entre 50 y 60, siendo excepcionalmente superior a 70, por lo que se puede hablar de una discapacidad intelectual moderada (Anneren, 1996).
Un 5% manifiesta un alto funcionamiento de CI superior a 60.
Un 65% manifiesta afectación moderada de CI entre el 40-60.
Un 5-7% manifiestan un CI por debajo de 40.
Un 95% de los niños con Síndrome de Down aprende a leer comprensivamente y disfruta de la lectura.
Los niños con SD presentan deficiencias a nivel cognitivo en:
· la producción del lenguaje y en el habla (Chapman, 1998);
· problemas de procesamiento de la información, deficiencias en la memoria a corto (captar y memorizar imágenes de objetos,listados de palabras, números y frases) y a largo plazo (Carlesimo, 1997; Brown, 2003; Clark, 2003; Nadel 2003);
· problemas de consolidación de la memoria.
· alteraciones del aprendizaje viso-espacial (Uecker et al., 1993).
· Dificultad para manejar diversas informaciones, lo que se traduce en una lentitud mayor a la hora de procesar, codificar e interpretar esta información, así como en dar una respuesta.
· Impulsivo, ante aquello que se le prohíbe o ante la presentación de varios objetos a la vez.
· Dificultad en los procesos de conceptualización, generalización, transferencia de aprendizajes y abstracción.
· Les cuesta la planificación de estrategias, encaminadas a la resolución de problemas.
· Desorientación espacial y temporal.
DESARROLLO PERCEPTIVO
· Manifiestan más tarde preferencias visuales por dibujos y adquieren más tarde la memoria visual de reconocimiento con dibujos abstractos y colores.
· En cuanto al sentido del tacto, la discriminación táctil es inferior y tienen más dificultades para diferenciar objetos con el tacto.
· Tienen un sentido musical especial. Parece ser que tienen mejor sentido del ritmo que otros grupos de alumnos con deficiencia mental.
CARACTERÍSTICAS DE LAS PERSONAS CON SINDROME DE DOWN
Características de la personalidad:
· Escasa iniciativa.
· Menor capacidad para inhibirse, dejándose llevar por la efusividad y el afecto excesivo.
· Dificultad para modificar sus conductas, tienen gran dificultad para iniciar actividades nuevas.
· Su capacidad de respuesta y de reacción ante cualquier acontecimiento externo es muy baja, mostrando un gran desinterés por todo lo que les es ajeno.
· Son constantes, tenaces, puntuales y responsables en su trabajo.
· Asimismo, se muestran colaboradores, afectuosos y sociables.
CARACTERÍSTICAS FÍSICAS
· Algunas de las señas físicas más comunes del Síndrome de Down son: pliegues en los extremos internos de los ojos, un puente de la nariz plano, orejas que son pequeñas o se ven más abajo de lo normal, cuello más corto y ancho, dedos meñiques curvos , un espacio entre el dedo gordo del pie y el segundo dedo del pie y extremidades inferiores ligeramente acortadas.
· Ninguna de estas señas será causa de problemas severos de salud pero son muy sensibles a las infecciones, localizadas preferentemente en oídos, ojos y vías respiratorias debido a su peculiar constitución.
ESCOLARIZACIÓN
El alumnado con retraso mental se escolariza en los centros ordinarios integrados en las aulas ordinarias con el apoyo especializado de los maestros y maestras de educación especial y de audición y lenguaje. Sólo se escolarizan en aulas y centros específicos de educación especial cuando sus necesidades educativas especiales permanentes están asociadas a condiciones personales de discapacidad que requieran, de acuerdo con la evaluación y dictamen realizados por los equipos de orientación educativa, adaptaciones muy significativas en las áreas del currículo oficial que les corresponda por su edad, y cuando se considere por ello que no sería posible su adaptación e integración social en un aula o en un centro escolar ordinario.
La escolarización es especialmente beneficiosa en los primeros años (infantil y primaria) agudizándose los problemas conforme los niños crecen, especialmente hacia el inicio de la secundaria, debido sobre todo a dos causas fundamentales:
√ Por un lado las diferencias intelectuales con los compañeros de su edad se van acentuando, lo que provoca un deterioro en la integración y un aislamiento cada vez mayor.
√ Por otro, la propia forma de escolarización: más asignaturas, más profesores, trato menos personal y familiar con el alumnado,…
Por todo ello Emilio Ruiz recomienda que el alumno en la medida de lo posible se escolarice en un centro ordinario, al menos durante los primeros años de escolarización, pero que sería conveniente que se fuera relacionando progresivamente con otros niños con su mismo síndrome, ya que así se pueden ir estableciendo amistades más duraderas en el tiempo.”
Durante la escolaridad, siguen el currículo establecido para la etapa educativa que les corresponde cursar, realizando las adaptaciones curriculares necesarias y, en algunos casos, tomando como referente las competencias curriculares del ciclo o la etapa anterior. Estas adaptaciones han de contemplar, con carácter prioritario, los objetivos, contenidos y actividades que contribuyan al desarrollo cognitivo del lenguaje y de la comunicación, así como de las destrezas psicomotoras, las habilidades sociales y de autonomía personal, aspectos que, por lo general, tienen un desarrollo limitado en este alumnado.
INTERVENCIÓN EDUCATIVA
¿Cómo han de ser los objetivos para un alumno con síndrome de Down?
Los objetivos que nos marcamos con un niño son la base de toda la programación, ya que de ellos van a depender los contenidos y las actividades que vayamos a realizar.
En ocasiones, como se ha dicho anteriormente, bastará con modificar las actividades o la evaluación, pero en los casos de las adaptaciones curriculares significativas, es preciso modificar o eliminar determinados objetivos del curriculo, o bien incluir otros que consideremos necesarios. En el caso de los niños con síndrome de Down, las adaptaciones curriculares significativas van siendo más numerosas a medida que vamos avanzando en el sistema escolar.
Si hay algo importante en las adaptaciones curriculares de los niños con síndrome de Down es la necesidad de descomponer los objetivos en objetivos parciales. Necesitamos analizar los pasos intermedios necesarios para alcanzar un objetivo final, de manera que el niño pueda adquirir un determinado contenido sin lagunas y sin dejarse aspectos básicos sin comprender.
Los objetivos han de ser:
- Individuales. Ningún niño es igual a otro, y un niño con síndrome de Down tampoco. La programación debe ir dirigida a cada alumno en concreto.
- Prioritarios, es decir, los más importantes para ese momento. Es preciso establecer prioridades, porque no todo se puede conseguir.
- Funcionales. Lo que para unos niños es funcional, no siempre lo es para todos. Por ejemplo, a la hora de realizar la pinza digital, algunos niños con síndrome de Down muestran más precisión con los dedos pulgar y medio. El profesor debe preguntarse qué es lo que pretende: o que el niño sea capaz de coger objetos pequeños o incluso escribir funcionalmente con una pinza “incorrecta”, o conseguir una pinza perfecta a costa de que ésta sea menos funcional. O, por otro lado, qué es más funcional: que el niño aprenda a comer por sí solo, a ser más autónomo y a tener más habilidades sociales, o que sea capaz de comunicarse en inglés.
- Secuenciales y estructurados. Debemos elegir aquellos objetivos que son base para futuras adquisiciones necesarias y dividir los objetivos generales en objetivos específicos.
- Evaluables, operativos y medibles. Si nos ponemos como objetivo “que mejore su atención”, éste no es operativo ya que es muy relativo. Es bastante previsible que mejore la atención de un niño, pero no sabemos cuánto ha mejorado. Por otro lado, nunca lo alcanzaremos, ya que siempre es posible mejorarla.
Evaluación
La evaluación de los aprendizajes de los alumnos con necesidades educativas especiales, en aquellas áreas o materias que hubieran sido objeto de adaptaciones curriculares significativas, debe efectuarse tomando como referencia los objetivos y criterios de evaluación fijados para ellos.
Las calificaciones obtenidas por los alumnos en las áreas o materias objeto de adaptación se expresan en los mismos términos y escalas a los previstos en las correspondientes órdenes legales establecidas para las diferentes etapas educativas. Pero, además, la información que sobre el proceso de evaluación se facilite a los alumnos y sus familias debe incluir además la valoración cualitativa del progreso de cada alumno respecto a los objetivos propuestos en su adaptación curricular.
Promoción del alumno
En la Educación Infantil se puede tomar la decisión de permanecer un año más en el segundo ciclo de la etapa por resolución de la Delegación Provincial correspondiente, cuando lo haya solicitado la dirección del centro, con informe motivado del tutor, conformidad de la familia y estimación positiva del Equipo de Orientación Educativa y Psicopedagógica de la zona correspondiente, de cara a alcanzar los objetivos de la etapa o favorecer su socialización.
En Educación Primaria y E.S.O. la decisión de promoción de un ciclo a otro o de un curso a otro se adoptará siempre que el alumno haya alcanzado los objetivos para él/ella propuestos. Se decidirá la permanencia de un curso o dos en estas etapas cuando se estime que puede alcanzar los objetivos del ciclo o etapa, la titulación o ser positivo para su socialización. Para el alumno que curse la E.S.O, existe la posibilidad de obtener el título de Graduado en Educación Secundaria si, en términos globales -grado de madurez- ha alcanzado los objetivos de la etapa.
Los dos cursos de Bachillerato podrán realizarse fragmentando en bloques las materias que componen el currículo de estos cursos, ampliándose en dos años la permanencia en la etapa.
En la Formación Profesional Específica se autoriza a los alumnos con necesidades educativas especiales a cursar las actividades programadas para un mismo módulo profesional un máximo de cuatro veces, y a presentarse a la evaluación y a la calificación un máximo de seis veces.
En cualquier caso se expedirá la acreditación correspondiente de años cursados, calificaciones obtenidas y consejo orientador sobre el futuro académico y profesional del alumno.
ACTIVIDADES
· Juegos 'en línea'. Haz click en la imagen para jugar. Si no te funciona debes instalar un pequeño programa (plugin)
· Recoge manzanas.
Este simpático zorro tiene que coger todas las manzanas que se caen del árbol. ¿Te animas a ayudarle? http://www.down21.org/mimundo/juegos/juegos/applecatch.swf
· ¡Cómo cantan los pajaritos!
En un árbol se apoyan 4 pajaritos cantores que necesitan de tu ayuda para poder cantar. ¿Quieres ver cómo cantan? http://www.down21.org/mimundo/juegos/juegos/memory.swf
· ¡A pintar!
¿Te gusta pintar? Aquí podrás pintar todo lo que quieras sin necesitar ni pinturas ni papel. ¡Anímate!
· ¡A leer!
Las dificultades de las personas con Síndrome de Down para vivir en integración social y para que su vida esté de verdad "normalizada", es fácil deducir que el objetivo de la adquisición de la lectura y la escritura se convierte en una necesidad más imperiosa para ellas.
Para todas las personas con Síndrome de Down deben programarse unos objetivos mínimos de "lectura funcional" que les permitan conocer y distinguir los signos públicos básicos: "empuje-tire" en una puerta, "salida-entrada", "caballero-señora" en los aseos, "peligro", "parada de autobús", etc. También es preciso que comprendan las instrucciones de teléfonos públicos, máquinas tragaperras, etc.
Pero además, con los datos experimentales actuales sabemos ya que estas personas pueden no sólo leer cualquier texto escrito, sino llegar a ser verdaderos aficionados a la lectura. Este es un objetivo alcanzable para un porcentaje de ellas cada vez más elevado.
Los grandes cambios que están produciéndose desde la década de los setenta han afectado favorablemente también a este aspecto de la educación de las personas con Síndrome de Down.
APRENDER A LEER Y A ESCRIBIR
El objetivo que se pretende alcanzar es establecer un primer contacto sensorial con el mundo de las letras.
En el segundo estadio se pretende pasar de lo perceptivo-visual a lo abstracto- conceptual, para acceder a una lectura-escritura utilitaria y funcional.
Siempre se tendrá en cuenta el nivel madurativo del niño, las diferentes discapacidades y sus conocimientos previos, de modo que los aprendizajes le sean significativos. Se combina el trabajo global en actividades de aula, con ejercicios más analíticos en sesiones de logopedia.
DESCRIPCIÓN DE LA EXPERIENCIA
La tarea inicial
La experiencia parte de la confección de un libro de actividades perceptivo-manipulativas con las letras del nombre.
Primer paso:
· A partir del nombre de cada niño (porque es más motivador), realizar trabajos de coordinación óculo-manual: pintar, pinchar, calca, recortar...las letras del nombre.
· Trabajar conceptos espaciales-temporales: Primero/último; Adelante/Atrás; Antes/después. Estos se aplican al nombre del alumno, donde debe faltar la primera y la última letra con el fin de que ellos lo complementen.
· Discriminación fonética y visual. Primero, memorizar el sonido que se encuentren en el primer y último lugar. Segundo, buscar otros nombres de niños y rótulos de la clase que comiencen o terminen con esas letras.
Es útil crear un rincón en la clase donde el niño pueda manipular las letras, ya que el interés viene primero por la manipulación, el contacto y el dominio sobre el objeto.
Segundo paso:
· Completar con la letra intermedia que falte.
· Buscar otras palabras donde esté la letra trabajada (rótulos de la clase). Compararla, ver la posición que tiene dentro de la otra palabra...
· Repetir el proceso seguido en el trabajo de conceptos espacio-temporales del primer paso, pero con cada letra intermedia.
· Contemplar el nombre aumentando la dificultad a medida que el niño/a va adquiriendo seguridad: primero que falte una letra, después dos.
Tercer paso:
· Componer diversos tipos de puzzles. Primero uno que divida al nombre en dos partes. Segundo, otro que lo divida por sílabas. Y tercero, uno que lo divida por letras.
· Por fin, se confecciona el libro de todas las fichas realizadas, la foto del niño delante y el nombre debajo (que en función de su habilidad, estará escrito, calcado, compuesto, pinchado, copiado...).
Paralelamente a este trabajo individualizado, se realizan actividades de carácter más global, como por ejemplo:
· Felicitaciones de Navidad, confeccionadas por el propio niño, con el texto que él elija (breve) y la firma.
· Fichas bibliográficas de los libros de la clase, haciendo constar el título, el día en que se lee, el nombre del niño que lo lee, y una breve anotación de si ha gustado o no.
Para trabajar la combinatoria de consonante-vocal se confeccionarán dos tipos de libros: el de lectura y el de escritura.
Libro de lectura:
Se escoge una de las letras consonantes ya conocidas por el niño, y se buscan dibujos de objetos que comiencen por dicha letra y su combinación con las vocales. (Ejemplo: la B; BATA, BETA, BICI, BOTA.)
La elección de las palabras se hará en función de tres parámetros: la longitud (lo más cortas posibles); la practicidad (mayor frecuencia en el repertorio del niño y el entorno), y la combinación de las cinco vocales.
Se coloca cada combinación, en mayúsculas, en el ángulo superior derecho de la hoja (por tanto, cinco hojas). Los dibujos se van repartiendo en las hojas en función de su combinación y sobre la palabra que lo representa.
Este material está todo plastificado, de forma que los dibujos puedan extraerse para ir eliminando paulatinamente el apoyo sensorial (memoria visual) y puedan leer la palabra por la propia mecánica, remarcando mucho la correspondencia sonido/grafía.
El procedimiento a seguir es:
· Enganchar todos los dibujos de la B en una hoja.
· Comentarlos, pintarlos...
· Leer las combinaciones: BA, BE, BI... (cambiar el orden en sucesivas lecturas). Buscar los dibujos que comienzan por las diferentes sílabas y clasificarlos en las hojas correspondientes.
· Leer las palabras que nos representan y engancharlos encima.
· Repetir el ejercicio cuanto sea necesario cambiando el orden de aparición cada vez.
Libro de escritura:
Paralelamente, se confecciona el libro de escritura, donde se colocarán los mismos dibujos para que el niño escriba el nombre debajo.
En primer lugar, le proporcionamos el modelo para que vaya prescindiendo de él a medida que logra aprender las palabras a través de la asociación, la copia, y la escritura de memoria.
Reforzar la interiorización de las letras y palabras con la realización de diferentes actividades, como manipulación directa de las letras; Fichas relacionadas con dichas letras y el ordenador. Este último es un recurso muy estimulante para los niños.
http://www.educacioninicial.com/ei/contenidos/00/0250/269.ASP
MANUALIDADES
PlayMais, manualidades con pasta natural
Las manualidades son una buena actividad para estimular la imaginación y la creatividad de los niños. Además les ayudan a desarrollar la motricidad fina y les mantiene entretenidos y concentrados por lo que es una buena actividad para hacer en clase.
PlayMais es un material para que los niños desde los tres años hagan manualidades. Es natural porque está hecho a base maiz, colorante alimentario y agua. Si los niños se lo meten en la boca se deshace y no es tóxico. Por supuesto es biodegradable. Es muy fácil de utilizar y admite distintos niveles de complejidad según la edad de los peques.
PlayMais son copos de múltiples colores que se pueden deformar, aplastar, hacer bolitas y recortar. Si se humedecen ligeramente se pegan entre sí o en distintas superficies como papel, cartón o vidrio. Permite hacer figuras en dos y tres dimensiones y si es necesario pueden utilizarse bastoncillos para mantener la verticalidad. Los copos pueden pintarse con rotulador para rematar la manualidad.
Se venden en cajas con diferentes cantidades de copos. El tamaño L incluye unos 500 copos, un cuchillo de plástico, instrucciones, palitos de madera y una bayeta para humedecerlos. El precio de esta caja es de unos 15 euros. También las hay temáticas de Disney, de princesas, piratas y animales entre otras, las últimas con un precio de unos 12 euros.
http://www.elbloginfantil.com/playmais-manualidades-pasta-natural.html
Las dificultades de las personas con Síndrome de Down para vivir en integración social y para que su vida esté de verdad "normalizada", es fácil deducir que el objetivo de la adquisición de la lectura y la escritura se convierte en una necesidad más imperiosa para ellas.
Para todas las personas con Síndrome de Down deben programarse unos objetivos mínimos de "lectura funcional" que les permitan conocer y distinguir los signos públicos básicos: "empuje-tire" en una puerta, "salida-entrada", "caballero-señora" en los aseos, "peligro", "parada de autobús", etc. También es preciso que comprendan las instrucciones de teléfonos públicos, máquinas tragaperras, etc.
Pero además, con los datos experimentales actuales sabemos ya que estas personas pueden no sólo leer cualquier texto escrito, sino llegar a ser verdaderos aficionados a la lectura. Este es un objetivo alcanzable para un porcentaje de ellas cada vez más elevado.
Los grandes cambios que están produciéndose desde la década de los setenta han afectado favorablemente también a este aspecto de la educación de las personas con Síndrome de Down.
HECHOS QUE INFLUYEN PARA MEJORAR
· Los programas de intervención temprana
· Los avances de la investigación biomédica y psicofisiológica
· Las investigaciones educativas que nos aportan los métodos, materiales y actividades que favorecen su mejor desarrollo.
Otro factor favorable es el mejor conocimiento que vamos teniendo de las características propias de los niños con Síndrome de Down. La experiencia del trabajo cotidiano nos demuestra que los niños que han sido estimulados y reforzados adecuadamente tienen una buena percepción y memoria visuales, y un buen lenguaje comprensivo. Estas "habilidades" son la base fundamental de algunos de los programas de lectura.
Las edades lectoras de los niños están por encima de sus edades mentales y, por supuesto, de sus edades lingüísticas; sin embargo, están por debajo de sus edades cronológicas.
La conclusión obvia es que no se debe esperar a una edad mental de 6 años para iniciar un programa de lectura, ni tampoco hay que esperar a que sea un niño verbal. Puede y debe empezarse antes.
Cuanto antes se comience más beneficio se obtienen, ya que el lenguaje en general mejora notablemente. En realidad, la iniciación "precoz" de la lectura (entre 3 y 4 años de edad) es una pequeña parte del programa de lenguaje.
El objetivo es amplio, no es sólo ir preparando al niño para una lectura en sentido estricto, sino que además aumenta y mejora el lenguaje comprensivo y expresivo, los conocimientos y el razonamiento.
Esta iniciación precoz conducirá a que muchos niños con Síndrome de Down entre 7 y 9 años tengan un nivel lector semejante al de sus compañeros de clase.
También es cada vez más frecuente encontrara entre ellos a verdaderos aficionados que eligen la lectura como actividad preferida.
Por el contrario, si se espera a que el niño tenga "madurez" (alrededor de los 9-10 años de edad cronológica del niño con Síndrome de Down), para empezar entonces con una cartilla silábica, convencional, sucede que el niño se siente mal, "vive" más su diferencia y su torpeza, se ve así mismo en inferioridad clara frente a sus compañeros.
Todo ello puede llegarle a un bloqueo, fobia y rechazo de la lectura. Este es uno de los actuales fallos en algunos colegios de integración.
BIBLIOGRAFÍA
· Marchesi A., Coll C. y Palacios J. (1990): “Desarrollo psicológico y educación, III. Necesidades educativas especiales y aprendizaje escolar.” Madrid: Alianza.
· Arnáiz P., Rabadán M. y Vives Y. (2008): “La psicomotricidad en la escuela: una practica preventiva y educativa (2ª ed revisada y actualizada)”. Málaga: Ediciones Aljibe.
· Linares, P. (1997): “Motricidad en un grupo de personas con necesidades educativas especiales” Revista Motricidad 3, págs. 187-207
GRUPO SINDROME DOWN
Marín Montiel, Patricia
Martínez de la Puente Gambra, Vicente
Presentación Molina Varona
Ocaña Sánchez, Eva
Pérez Gabaldón, Mª Dolores
Ramón Yago, Sonia